De la Crisálida que extiende sus Alas a la Medicina del Lobo

Después del temblor del 19 de Septiembre de 2017 al Principio del 2018

De la Crisálida que extiende sus Alas y de la Red Sanantes que se arraiga en un Propósito Común… de la muerte al renacimiento, del sostenimiento de lo viejo a la impuesta oportunidad de cambio, de lo real que sostenemos por patrón a lo creativo que asumimos por amor.

Por una comunidad en red y un modelo replicable, desde la crisis y honrando a los muertos hacia un proceso de transformación consciente y creativo.

Hay muchas preguntas que aun requieren respuestas, y simultáneamente un río de la vida que las contesta sin precedente, se agolpan los atisbos de esfuerzos y las oportunidades de renacimiento, abunda la solidaridad y el amor, muchas personas dispuestas a un nuevo modelo y hacia una nueva perspectiva, entre el eclipse y el encuentro, pasando por embargos y salidas apresuradas a colapsos totales y rescates obstaculizados, del encuentro con Carmen y la violencia de su familia que no soporta sus diferencias y su belleza, su rencor y su respuesta que la empodera para volver a centrarse en sí misma, así como con Juan con dolor de espalda y una vida de albañil, pocas palabras pero un Corazón agradecido o doña Teresa con esa vieja cicatriz que aun duele y que requiere masaje y ablandarse, tirar los escombros y volver a empezar a pesar de sus 76 años… las calles enardecidas de gente ayudando, de miradas a los ojos y abrazos largos, de encuentros íntimos y Corazones Abiertos… ¿cómo no dejarse afectar por semejante revolución? La revolución del Espíritu libre, ese mismo Espíritu que crea y se recrea, que sin pretender fantasías acepta la realidad como una oportunidad única y la toma íntegra, con la mejor visión, la más enriquecida posible.

Estar en medio de este proceso, desde donde estoy ha sido y sigue siendo una experiencia que me honra profundamente. Conocer a las personas, mirarlas a los ojos, hablar de sus vidas y la mía entrelazadas, conocer sus miedos y defensas, también su luz y su saber, estar en medio y como red que se teje cual medicina de la araña que osó buscarme y permitirme conectar con una fuerza que atraviesa mi ser y lo enaltece, fuerza que no pertenece a nadie, ingobernable pero que se deja guiar, que sigue un rumbo y tiene una resonancia, capaz de demoler viejas empresas fallidas y creencias que nos atan.  Así en medio de todo esto tengo un sueño, me atrevo a elevar mi rezo al Gran Espíritu y me devuelve su aliento convertido en instancias de vida, en vibraciones, en latir, en vida renovada.

Mis Hermanos del Alma cobijando mi Corazón y tomándolo cual tesoro junto al Vuestro. ¡Cuántos regalos! ¡Cuánto Amor!

Ahora el sueño, esta red de centros que replican un modelo de trabajo y de transformación que se atreve a colaborar con la salud consciente, sentida y planetaria, que toma los aportes y los reúne, se atreve a ver las relaciones y dar dignidad a las fuerzas contradictorias, antagónicas y aun destructivas. Toma esa fuerza y la convierte en oportunidad. Se deja morir cuando toca morir y renace cuando es preciso hacerlo. Un grupo humano de la mayor riqueza posible, un grupo humano real.

En esta doble perspectiva donde todos tenemos una virtud inalienable e insustituible, donde la singularidad y la irreversibilidad del tiempo son implacables, marcan la oportunidad, relatan incertidumbre y son el motor de la vida, en esa perspectiva que alumbrara Morin con sus ideas y que embellecieran tantos en un largo camino a casa, sé que este lugar, este Corazón encendido me fue otorgado y lo puse ahí porque tocaba, rendido a este destino que creamos juntos, lo tomo… lo sigo tomando.

Hacia el final, la Medicina del Inipi, la voz Lakota de Temazcal,  los amigos y hermanos del Alma, el Cuchumá y la Salvia, el Mar y sus Seres, llenos vida y de fluir, la Luna Llena y su magia, el Rock y la Libertad, el Amor… más amigos y familia, esa que elegimos y que honramos con los Abrazos del Corazón… Este año se muestra fuerte y claro, y nos invita, como siempre, a Crear con Consciencia, a confrontar con Amor, a Reflexionar desde el Corazón… por un mundo mejor y un Planeta con espacio para Todos y para la Vida.

 

¡Bienvenido el 2018!

Dr. Gabriel Oscar Bertona Chiaraviglio