El estrés… el miedo, la química de la guerra, la ansiedad, el desgaste y la enfermedad.

TEXTOS Y REFLEXIONES… síntomas y analogías

 

Estrés… un término que tiene un origen académico y uso común en la divulgación mayormente en cuanto a fisiología y medicina se refiere, pero demasiado abarcativo y poco preciso. Esto lo vuelve poco útil si no lo podemos desdoblar en sus componentes y desencadenantes, especialmente en otras áreas como la psicología y el desarrollo personal. Aun así, en la práctica clínica si no conozco los elementos que lo constituyen y no lo puedo traducir en intervenciones médicas, lo vuelve un término que se puede utilizar indiscriminadamente sin decir nada, sin aportar cambios. Lo cual nos hace revisar su profundidad y plantear algunas medidas o propuestas que nos saquen de sus nefastas consecuencias para la salud, cuando es adoptado reactiva y automáticamente como una forma habitual de vivir, muy común en nuestras ciudades y en esta época.

 

En términos fisiológicos, el estrés es una respuesta corporal y sistémica a un estímulo externo o interno, que objetiva o subjetivamente pone en peligro nuestra vida (Ver cuadro 1) En relación a esto , hay una enorme gama de estímulos y circunstancias que pueden desencadenar este mecanismo de sobrevivencia, como diría el Dr. Bruno Parodi: “el estrés es una enorme bolsa donde caben muchas cosas, como la de Santa Claus”.

 

Ejemplos de estímulos mas objetivos y externos: una cirugía, un asalto, una quemadura importante, el ayuno prolongado; y ejemplos de estímulos mas subjetivos e internos en relación a circunstancias que desencadenan respuestas condicionadas por la impresiones o memorias históricas: si sufrí hambre o carencias de niño, la respuesta frente a la posibilidad de no comer o sobrevivir sino pago la hipoteca de la casa, o la cuenta del supermercado; o la respuesta frente a los hombres de tensión, sudoración de manos, angustia, porque fui violada sexualmente cuando fui niña por un familiar, o por ejemplo, ante una araña inofensiva desencadeno una respuesta fóbica por la proyección que hago sobre el artrópodo en relación al miedo que me producen los conflictos que me paralizan porque sufrí gritos y golpes cuando no respondía como mis padres esperaban de niño.

Cuadro 1[i]

La neuroquímica asociada al miedo, al menos, lo más estudiado, es una química ascendente, en escalada (desde una angustia o miedo inespecífico, pasando por las fobias, y llegando a la parálisis, el pánico o la disociación), y depende del antagonismo sinérgico de la noradrenalina y la dopamina, y periféricamente de la adrenalina y el cortisol principalmente.

Estas reacciones simpáticas permiten que se redistribuya la circulación, se privilegia la central (sistema nervioso y corazón), se agudicen los sentidos, estemos con una actividad mental mas precisa y veloz, para prepararnos a la respuesta inmediata, aumente la respiración, mejoren los reflejos, aumente la frecuencia cardíaca y la presión arterial, tengamos más energía disponible y moléculas que lo faciliten (por ejemplo los triglicéridos), nos anestesiemos frente a otros estímulos (a través de las endorfinas), etc. Como vemos, todo en el marco de la benéfico, esta respuesta protege la vida. Pero es altamente vulnerable a la experiencia previa y a la memoria, y eso implica que el tamaño de respuesta interna y sus consecuencias no dependan solo del medio externo, sino del condicionamiento interno por experiencias anteriores, y no necesariamente propias (si fui testigo de actos violentos, aunque no fueran contra mi directamente, eso me condiciona, porque para mi neuroquímica también me ocurrieron a mi – empatía), aun inconscientes o negadas (por ejemplo un abuso que condiciona una respuesta hiperreactiva sin razones objetivas para tal cosa).

Frente al estrés, por ser funciones no prioritarias para la sobrevivencia inmediata, se inhiben:

  • Inflamación
  • Reproducción
  • Digestión
  • Crecimiento

Esto significa que el sistema inmunológico se deprime (volviéndome más vulnerable a infecciones y mutaciones celulares), las células nerviosas dejan de dividirse (aprendo menos, me vuelvo menos creativo y mas neurótico o reactivo y mecánico), aparecen problemas digestivos y no solo con los alimentos sino también con la experiencia que vivo (analogía con lo que no puedo asimilar de la vida, por el riesgo, la dejo de disfrutar) y obviamente dejo de ovular o trastorno mi capacidad de crear, y no solamente bebes sino también proyectos o ideas que se vuelvan realidad.

  • El “estrés crónico” perpetua la respuesta aguda (desensibilización, inhibición de la retroalimentación negativa, aumento de la sensibilidad de la corteza suprarrenal al ACTH), pero mermando la respuesta de GH, prolactina, testosterona. Retraso en el crecimiento, disminución de la fuerza y la integridad, etc. Crónico significa que la respuesta se prolonga en el tiempo, vivo con miedo, vivo a la defensiva, vivo siempre listo para huir o atacar.. Así termino desgastando los sistemas biológicos y mi edad biológica aumenta mucho más en relación a la cronológica, envejezco prematuramente.
  • El estrés crónico y la depresión mayor están asociados a menores conexiones sinápticas y disminuicón del volumen cerebral, asociado a diferentes factores de transcripción (GATA1) – Duman y col. Esto es bastante claro en relación a las repercuciones de vivir en una química extenuante, en donde el miedo agota y aletarga, aprendemos menos, podemos integrar menos la información y nos encerramos en la conducta neurótica, obsesiva, repetitiva, ciclos interminables que no cesan de repetirse. Romper estos ciclos está relacionado con aprender, soltar, abrirnos a lo nuevo, desapegarnos de viejas ideas.
  • El estrés crónico ha sido relacionado con la diabetes, hipertensión arterial (aterosclerosis, hipertrofia cardíaca), las úlceras gástricas, el colon irritable, la inmunodeficiencia, los tumores, las infecciones, entre otras enfermedades.

  • Disminución de estradiol, testosterona (en el estrés crónico, me vuelvo menos activo, integro y fuerte… y no así en el estrés agudo que aumenta la testosterona facilitando la agresividad), progesterona, prolactina y gonadotropinas[i], hormonas reproductivas, trastorno del ciclo menstrual y dismenorrea (dolor, cólicos, distensión al menstruar, que en nuestra época se asume como “normal” por la alta incidencia de esta alteración (me duele ser mujer))
  • Analgesia y tolerancia, aumentan las beta-endorfinas (analgesia, hipertermia, hipoventilación, hipotensión, y disminución del gasto cardíaco) para atravesar la dura experiencia me insensibilizo y me desconecto de lo que siento, como sino existiera. Una defensa muy común en médicos y otros al servicio en momentos difíciles, lo cual en exceso termina distanciándome tanto de la experiencia que me vuelvo inhumano e incluso por decisiones desventajosas pongo en riesgo la vida propia o del otro.

“Sin la memoria del estrés, no habría estrés. El estrés se convierte en una profecía autocumplida” Aun cuando no haya factores objetivos, si vivo en el miedo y en la defensa, mi cuerpo se enferma según mi actitud. Se enferma de miedo. En mi experiencia una fobia o miedo paralizante puede ser simplemente la continuidad en el tiempo de un patrón que se estabilizo y se repitió sin intervenciones correctivas, en una química neurológica en escalada. Lo que inició siendo una angustia termina siendo una fobia, porque nutrí y sostuve el miedo y esa actitud en mi vida. También asociado al trastorno obsesivo compulsivo.

No es necesaria la percepción consciente del dolor para desencadenar la respuesta al estrés (se observa aun en pacientes anestesiados), y esto significa que puedo no sentir, no tener conciencia sobre el proceso del estrés desencadenado, pero no por eso no existe. Aunque hay muchas cosas de las que no soy consciente, igual suceden. Por eso para sanar, soy llamado una y mil veces al movimiento consciente, a sentir como estoy, a tomar consciencia de lo oculto, lo interno, lo otro.

El peligro de un estrés inadecuado y repetido es mucho mayor que cualquier estrés catastrófico por sí solo, y esto no es más que la sumatoria corporal y el desgaste de los sistemas orgánicos por una sobre-estimulación en una sola dirección.

A su vez la activación del sistema inmunológico, activa la respuesta al estrés especialmente mediado por IL-1, IL6 y TNF. El estrés crónico retrasa el crecimiento (GH). Disminución de la filtración glomerular. Inhibición de la secreción ácida, motilidad y vaciamiento gástricos, así como aumento del movimiento peristáltico del colon y la defecación. Aumento del tono simpático y redistribución de la circulación, vasoconstricción periférica. Hipertensión arterial.

Ante el estrés agudo predomina la ansiedad, el miedo y la ira, y ante el estrés crónico la depresión.

El cortisol, un esteroide secretado por las glándulas suprarrenales como parte de la respuesta orgánica al estrés: transforma en glucosa, el glucógeno hepático y puede degradar las proteínas para obtener glucosa libre, la energía para la guerra. En estrés crónico, y enfermedades que aumentan su secreción está asociado a desgaste muscular, diabetes, fatiga, osteoporosis, adelgazamiento de la piel, redistribución de la grasa corporal. fragilidad de los vasos sanguíneos, hipertensión, retención de líquidos, supresión del sistema inmunológico y alteración de las funciones mentales.

Ahora bien, en relación a lo anterior y en torno al tratamiento del psicotrauma, cabe mencionar la importancia del manejo especializado y cuidadoso. Es muy común caer en la re-traumatización, o la re-victimización, ya que después del trauma original o raíz, viene lo peor, y esto no dicho por mi, sino por víctimas de secuestro, violaciones, incesto, y otras. Lo peor viene cuando alguien me interroga sin ser empático, cuando mi madre niega lo que digo y me culpabiliza, o no lo denuncia, sino que calla y se vuelve cómplice, cuando la sociedad y su machismo me vuelve culpable, cuando el médico me revisa sin tacto ni consentimiento informado, cuando se me abruma con preguntas sin acompañamiento ni opciones de reprocesamiento de la experiencia sufrida, cuando no se me acompaña con confirmación, apoyo, reencuentro con mi poder, ya que el trauma me dejó con la sensación de ser poseída, usada o usado, pisoteado, donde yo dejo de tener presencia, y estima para necesitar reconstruirme y reinventarme. Si el trauma raíz era innombrable o abrumador, si sentir o revivir la experiencia era “como morir”, es probable que accedamos a distintas mecanismos de defensa, como la disociación, la negación o la sobrecompensación. Esto puede enmascarar esta experiencia hasta tanto esté yo lista o listo para afrontarlo y reprocesarlo, convirtiendo lo peor en una oportunidad de evolución y fortalecimiento.

 

Algunos componentes, algunas medicina

En un estudio con roedores se demostraron varios aspectos inherentes a la respuesta al estrés. La respuesta era mas intensa si era: 1) Imprevisible (las descargas eléctricas sin regularidad ni señal previa), 2) Fuera de Control (aun cuando no recibieran la descarga el hecho de no poder controlar o detener la señal de alerta desencadenaba la respuesta) y 3) Sin salidas a la Frustración (las ratas que estaban amarradas sin poder morder algo mientras recibían la descarga tenían una respuesta más intensa)[ii]

Ahora imaginemos como estaría nuestra química interna frente a los robos, los secuestros, el narcotráfico y ser víctimas de la impunidad, si nos puede ocurrir en cualquier momento y no tenemos ningún control sobre eso… ¡Qué bueno que no somos ratas!

 

¿Cuáles son algunas medicinas para esta respuesta biológica condicionada por nuestra historia?

¿Podemos ir más allá del trauma raíz, trascender las huellas en mi personalidad, acompañados por la recuperación de la confianza, del control y contenidos por recursos que me empoderen?

¿Podemos abrirnos y aceptar lo imprevisible? ¿Entender que la incierto es la semilla de lo nuevo y la renovación de todas las cosas? La sabiduría de la Incertidumbre.

¿Estamos dispuestos a salir de la necesidad de satisfacer solo nuestras necesidades personales, dejar de tener la razón o que mi posición prevalezca, para favorecer la posición conjunta? ¿Me abro al otro, su posición, su riqueza, su aporte, en comunión o integración al propio, y así propicio una actitud personal que se adapta y fluye? Adaptabilidad, respeto e inclusión de la diversidad.

¿Necesitamos librarnos de la ilusión de que podemos controlar los resultados? ¿Entendemos en profundidad que los resultados dependen de muchos factores que se salen de nuestro control? Si es tan simple: ¿estoy dispuesta a confiar en lo que sucede, como un maestro y una oportunidad que me impulsa, me enseña, me propone y me desafía, con la cual dejo de luchar e intentar manipular? ¿Me atrevo a confiar en el presente y su riqueza, y aportar de mi lo mejor para el bien de todos? Confianza en el eterno presente.

Si viviéramos mas libres de las expectativas sin duda nos frustraríamos menos, y aun así frente a la frustración, o al no sentir mis deseos o necesidades satisfechos: ¿Cómo reacciono? ¿Puedo librarme del consumo compulsivo de alimentos, o mis adicciones, o la compra compulsiva de ropa, en respuesta a la ansiedad y al estrés que no puedo canalizar de otra manera? ¿Cuáles son mis actitudes compulsivas, reactivas, para salir del estrés o disminuir sus efectos? ¿Estoy dispuesto a detenerme en este ciclo reactivo, profundizar, sentir, nombrar lo interno, para dar cauce consciente a estas pulsiones? La libertad no solo que puedo vivir, sino que vivo…

 

Posibilidades y oportunidades

Aquí propongo algunas prácticas que pueden apoyarnos en el proceso de librar a nuestras células del estrés crónico y sus consecuencias. Para nada planteamos que el estrés es algo que no debería ocurrir, sino el instalarnos en actitudes que nos lleven a “vivir estresados” como una forma de vida hace que dejemos de beneficiarnos de esta respuesta para perjudicarnos con sus consecuencias. La salud está en la mesura, el equilibrio, el balance, la templanza, y por esto mismo la salud se desarrolla… deprimirnos y enfermar es fácil, no tenemos nada nuevo que hacer para alcanzarlo, simplemente con repetir automáticamente lo de siempre lo logramos. La felicidad y la salud se construyen, se promueven, se asumen como un acto creativo y consciente.

 

Prácticas y conciencia de como sostenemos y nutrimos el patrón

Desarrollo personal

Es una práctica en el sentido que me dispongo día a día a este desarrollo personal… me dispongo a observarme, a una autocrítica constructiva, a revisarme, a conocerme, mirar para adentro, nombrar el mundo interno, enigmático e inconsciente, sacar de mi, desencadenar y manifestar potenciales dormidos, aletargados, descubrirme y redescubrirme, y desde mi experiencia personal a los demás y al mundo… Esto lo puedo realizar a través de muchos caminos, puede ser una disciplina espiritual, terapia psicológica individual o de grupo (donde tomo consciencia de como sostengo mi actitud que me enferma, pongo un límite al mecanismo y amplifico mis virtudes), formación formal o no formal, lectura reflexiva, etc.

Meditación

El Fisiólogo R. Keith Wallace de la Universidad de California, investigó a practicantes de meditación en relación a la respuesta al estrés y al envejecimiento. Definió al estado conseguido en la práctica como “vigilia hipometabólica”, vivir la cotidianidad en un estado de relajación profunda. Los practicantes tenían menos enfermedades cardíacas, menos cáncer, y una edad biológica menor a la cronológica, así como niveles de dehidroepiandrosterona (DHEA) más elevados (disminuyen en los ancianos y después de situaciones de estrés, como un precursor de glucocorticoides y marcador de la exposición al estrés)[iii]

La Dra. Perla Kaliman y cols demostraron que después de una práctica de meditación la expresión de ciertos genes proinflamatorios había disminuido, así aumentado otros protectores, con esta y otras investigaciones similares  (Benson et al 2008) sigue estando clara la relación entre “las ideas, la disposición, la actitud”, y lo que generamos en el cuerpo, lo que somatizamos, además de la validación de las prácticas meditativas como intervenciones sanadoras[i].


La meditación como práctica nos propone el desapego de las ideas, las emociones y las sensaciones corporales, estar en tiempo presente, simplemente aqui y ahora, con una percepción plena. El apoyo de la práctica implica llevar esto a la vida de todos los días, vivir en meditación. Es una práctica que paso a paso nos ayuda a librarnos de la respuesta al estrés y de las consecuencias del mismo a nivel celular, enseñando al cuerpo a responder relajadamente a los estímulos que antes nos hubieran tensionado, y sino, no perpetuar una respuesta que por su naturaleza basta con que sea aguda, actual y transitoria para cumplir con su función vital.

Movimiento consciente. Danza circulares, sagradas, Gurdjieff.

Es muy importante el movimiento y el ejercicio físico para mantener el cuerpo libre de tensiones, fuerte y relajado; pero es igualmente importante que ese movimiento sea consciente, y no automático y compulsivo, ya que de esta manera puedo lastimar y robotizar mis movimientos. La danza es por un lado actividad, movimiento, vida y por otro, sensibilidad, sensualidad, belleza, intuición y consciencia plena (especialmente las danzas de Gurdjief), donde vamos disecando las partes del cuerpos, dándoles vida propia, liberando automatismos y posibilitando el movimiento consciente. Así los tejidos se van librando de la memoria traumática, de la historia, de rediseñan y se reconforman en un nuevo orden y propósito presente.

Yoga, Taichi, Chi kung y otras afines.

Estas disciplinas que nos llegan de oriente, nos ayudan a movernos con consciencia espiritual, liberando rigidez, y memorias, al mismo tiempo que me dispongo en una actitud meditativa. El movimiento de la energía de forma consciente va activando y facilitando el acceso a distintos potenciales internos. Mi día a día se vuelve más placentero( revisar referencia 8), tengo más energía, mis movimientos se vuelven mas frescos y activos, y se van libernado “achaques”, dolores, molestias, producto generalmente y en gran medida del sedentarismo y la baja actividad. “Todo lo que no se usa se atrofia”. Además queda cada vez más claro para la ciencia el efecto de las prácticas meditativas y afines en el ADN, la desinflamación y la liberación del estrés(6)

Canto y mantrams

El canto también puede ser utilizado como una práctica liberadora de estrés, en donde la expresión y la vibración sonora libera memorias y bloqueos, tanto conscientes como inconcientes que me condicionan. La vibración permea el cuerpo, llega a las células y las sacude, con un mensaje de vida, de amor, de esperanza. Esto también es sanador.

 

Una reseña personal

“Lo viví tras muchos intentos, y así volví a empezar… teníamos que buscar, aventurarnos y volver a hacerlo, aunque las esperanzas fueran pocas, o vanas, y sin caer en la resignación de lo conocido ni en la frustración del sueño que parece utópico. Fue muy intrincado el camino, y sanando sané… Ayudando a sanar a otros, por fin empezé a sanar… y sanar fue un proceso de descubrir, de lidear con lo más temido, el propio error, la propia sombra, mi ira y mis dudas, lo que hace tambalear y lo que se resiste a Ser.

Un error y la circunstancia que lo antecede, el contexto y la posibilidad que lo posibilita, lo premeditado y lo reactivo, el poder de la conciencia y la libertad, versus lo determinado, la predecible, la definido. La danza de las dualidades, y la oportunidad de realizar el polo elegido, o la danza armónica que se gana con trabajo, con amor, ciencia y arte. A eso hoy llamaría, trascender el estrés o el miedo (por lo que pone en riesgo la vida), y usar la historia como mentor del cambio u oportunidad de una salida nueva.

Entonces fue la hermosa oportunidad de volver a enamorarme… Mas que un concepto, una imperdible etapa de todo ciclo… No puede la semilla brotar y emprender ese camino tan incierto a menos que este enamorada… Todo lo importante empieza así, y claro está… Es solo el principio.”

 

Dr. Gabriel Oscar Bertona

El Síntoma y su función

Manizales, Colombia, Abril de 2012, actualización Junio 2017.

PD: complementa esta lectura con textos de desansiedad.com; ¡gracias Fabiola por tu valiosa labor!


[i] *Baumann, Turpin; Neurochem Res (2010) 35:1875-1879

2 FISIOLOGIA HUMANA, J.A.F. TRESCGUERRES, EDIT McGRAW HILL INTERAMERICANA

3 CUERPOS SIN EDAD, MENTES SIN TIEMPO, DEEPACK CHOPRA, EDITORIAL ZETA BOLSILLO, 2010

4 Bases Neurocientíficas y aplicaciones prácticas, Psicofarmacología Esencial de Stahl, Editorial aulamedica 3ra edición 2008 (la mayoría de las imágenes son de este libro, excepto el cuadro que corresponde a la referencia 1)

5 Decreased expression of synapse-related genes and loss of synapses in major depressive disorder – Duman and col. Nature Medicina (2012)

6 What Is the Molecular Signature of Mind–Body Interventions? A Systematic Review of Gene Expression Changes Induced by Meditation and Related Practices. Frontiers in Immunology. 16 June 2017 | https://doi.org/10.3389/fimmu.2017.00670.

7 Genomic Counter – Stress Changes Induced by Relaxation Response, Benson et al 2008, revisar: https://doi.org/10.1371/journal.pone.0002576

8 Ver: “Aumenta el placer y baja la ansiedad” en  https://www.youtube.com/watch?v=tFXZcHOat1k